El vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) José María Macías ha denunciado este jueves que «otros poderes del Estado» han ejercido «presiones» sobre el órgano de gobierno de los jueces para que no realizara los nombramientos efectuados ayer en puestos clave del Tribunal Supremo con el fin de hacerlo parecer «inoperante» y forzar así su renovación, pendiente desde hace casi dos años.
En un artículo publicado en ‘La Razón’, Macías se ha referido a los nombramientos concretados el miércoles para renovar tres presidencias (de las Salas de lo Contencioso-Administrativo, lo Social y lo Militar) y ocupar tres vacantes en la Sala de lo Penal. Según este vocal, las designaciones se llevaron a cabo en «un contexto anómalo» porque hubo «presiones tan impropias como insólitas».
En un Estado democrático, cuya Constitución garantiza la división de poderes, es impropio que otros poderes del Estado presionen al gobierno del Poder Judicial para que no cumpla sus funciones y es insólito que eso haya pasado con el nivel de virulencia y agresividad que se ha desplegado», ha declarado.
Macías ha explicado que la razón de estas «presiones» son «las dificultades para cerrar un acuerdo para la renovación del CGPJ». «Parece que se ha llegado a la conclusión de que la fórmula para solucionar ese problema es generar otro mucho mayor que tense las instituciones, hacer inoperante el Consejo General del Poder Judicial para que, según una infeliz expresión de hace pocos días, se ‘descomponga’ o parezca que lo está y ello obligue a pactar su renovación en unos concretos términos», ha expuesto.
Así las cosas, el vocal ha considerado que el CGPJ dio una «lección» al acordar estos seis nombramientos, destacando que sus miembros «se aislaron de las presiones, no generaron ruido y cedieron hasta donde pudieron renunciando a lo menos posible» para cumplir sus funciones y preservar de este modo la «integridad» de la institución.
«El Consejo General del Poder Judicial ha señalado un camino para solucionar un problema que no es suyo. Que ese camino se siga o no será el acierto o el error de otros. Mientras tanto, la institución cumplirá el papel constitucional que tiene asignado en garantía de la estabilidad y buen funcionamiento del Poder Judicial», ha afirmado.
Macías ya alzó la voz el pasado 23 de septiembre al declarar, en una entrevista en la Cadena SER, que el Rey Felipe VI no asistiría al acto de entrega de los despachos a los nuevos jueces, celebrado el pasado viernes en la Escuela Judicial de Barcelona, porque el Gobierno no lo había autorizado.
El CGPJ se sitúa en estos momentos en el centro de la batalla política debido a la falta de acuerdo entre el PSOE y el PP para renovarlo, un acuerdo que parecía cerca en verano pero que finalmente naufragó.
