La relación entre la reina Letizia y la infanta Cristina pasó a ser inexistente después de que estallase el escándalo del caso Nóos, que concluyó con Iñaki Urdangarín condenado a prisión por delitos varios, además de con una multa a la propia hermana de Felipe VI.
Sin embargo, la relación entre la monarca y su cuñada no era buena desde hace tiempo atrás. Te contamos cómo se encendió la llama que provocó el enfrentamiento y distanciamiento entre ellas.
LA LLAMA DE LA DISCORDIA
Todo iba bien entre ambas cuñadas hasta que se celebró el bautizo de la cuarta hija de Iñaki Urdangarín y la infanta Cristina, Irene, nacida el 5 de junio de 2005. La hermana de Felipe VI se encargó de distribuir a todos los invitados y pensó que sus suegros podrían quedarse en el Pabellón del Príncipe.
Tras pensar en esta posibilidad y planteársela a sus suegros, estos aceptaron la invitación, por lo que llamó a su hermano para pedírselo. Felipe no puso objeciones a que se quedasen en su casa, pero sí Letizia, por aquel entonces embarazada de Leonor.
A la infanta Cristina le sorprendió la respuesta de su cuñada, que se negó a alojar en su hogar a los padres de Iñaki Urdangarín. Se justificó asegurando que al estar embarazada que no se encontraba bien y que no le apetecía tener en su hogar a personas que no conocía.
