Salmorejo, gazpacho… recetas que puedes hacer con tomate

La cocina tiene muchos encantos, y no sólo recae sobre el gusto, sino también por el placer que genera aventurarse a unos platos ricos que merecen la pena compartir con los seres queridos. El tomate es el ingrediente principal del día de hoy, pues este es uno de los frutos más versátiles que a todos no facilita la vida cuando se trata de practicar la gastronomía. Por ejemplo, un rico salmorejo, un gazpacho. Nadie se resiste a estas ricas comidas.

Seguramente esperabas con ansias este momento, así que hemos venido con todas las fuerzas para darte los mejores consejos para que hagas estas recetas en casa, y le brindes a tus acompañantes la buena sazón que tienes. ¿Eres capaz de mostrar tus conocimientos en la cocina? Sabemos perfectamente que la respuesta es positiva. Por eso motivo, te invitamos a disfrutar de este material exclusivo donde te vamos a contarte todo con lujos de detalles. Estas son las mejores recetas, para los amantes y aficionados a este mundo del buen sabor.

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El salmorejo perfecto

Siempre hay trucos que merecen la pena utilizar en la cocina para lograr el éxito en las recetas. En este salmorejo como es un plato crudo tenemos que usar el tomate de buena calidad, porque de tener algunos que ha estén en estado de descomposición el sabor no será nada agradable. Te recomendamos comprar tomate pera que estén rojos, y en su punto.

Ingredientes:

  • 1 kilo de tomate
  • 200 gramos de pan duro.
  • 1 diente de ajo
  • 160 ml de aceite de Oliva
  • Sal
  • 1 huevo cocido
  • Jamón ibérico en taquitos o jamón serrano

Tienes comenzar lavando el tomate, le quitas el pedúnculo y lo trituras en la licuadora. El siguiente paso es pasar la mezcla por un colador para quitar las pepas y pieles, con el fin de tener un salmorejo más suave. Luego de eso, tienes que incorporar al tomate batido el pan, tiene que dejar que se empape bien por 5 minutos.

Después de eso, lo pones triturar nuevamente en una batidora si posible. Le agrega el ajo, y el aceite. Desde incorporarlo en especie de hilo para que emulsione y agarre textura. Verificas que tenga sal, y ya está listo para servir. Con un plato hondo, y jamón, le colocas el huevo duro picado, y a disfrutar.