El pan es un alimento tan cotidiano que lo comemos prácticamente a diario y en muchos casos, varias veces al día. Y a pesar de eso comentemos muchos errores al conservarlo en casa, que nos impiden disfrutar de este rico bocado manteniendo sus características de sabor y textura. Ya que cada día salimos a comprar pan y a veces puede ser que nos sobre, conviene saber cuáles son los trucos para conseguir que se mantenga en perfecto estado y no tener que tirarlo porque se ha puesto rancio antes de lo previsto. Toma nota y no pases ni un día sin pan.
2GUARDARLO EN UNA BOLSA DE PLÁSTICO
Las barras de pan o panecillos con corteza seca y crujiente, no deben guardarse nunca en una bolsa de plástico. El pan es un preparado que tiene características higroscópicas, que significa que atrae y absorbe la humedad del ambiente. Si lo colocamos dentro de un plástico impermeable, donde no hay transpiración y se genera humedad, el pan la irá absorbiendo y se volverá blando y chicloso rápidamente, perdiendo tu rica textura crujiente. Lo mejor es recuperar la bolsa de tela de toda la vida, o bien las clásicas paneras de madera, que permiten que el aire circule y ayuda a mantener la textura del pan.