El ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha asegurado que «nadie» del Gobierno le ha dicho que sus declaraciones en una entrevista en un diario británico sobre la ganadería intensiva son mentira e insiste en que se trata de un «bulo» y una «tergiversación dirigida de esas palabras, con falsedades y mentiras» por parte del «lobby cárnico».
«Es evidente que ha habido polémica por cómo mis compañeros, los socios de coalición, se han tomado estas declaraciones o, más bien, las declaraciones que no dije. Pero en cuanto a lo sustantivo, yo no he visto a nadie que me haya dicho: ‘Alberto, lo que dijiste es mentira’. Nadie», ha aseverado en una entrevista en Infolibre.
En esta línea, se ha reafirmado en que sus palabras fueron «impecables». «Lo que dije lo mantengo y se convertirá en la línea de trabajo de todos los países occidentales», ha enfatizado, a la par que se ha apoyado en la «evidencia científica»
A su juicio, sus palabras fueron «tergiversadas» y se creó un «bulo» sobre sus declaraciones para que pareciera que él «atacaba» al conjunto del sector ganadero. «Yo hice una defensa encendida de la ganadería extensiva, familiar, social, que es la que genera puestos de trabajo».
En concreto, Garzón ha acusado al «lobby cárnico» de crear el «bulo» y a las formaciones de «derechas» por intereses políticos. «Al lobby cárnico no le gusta ese tipo de políticas y por lo tanto construye el bulo. Luego hay quienes se aprovechan para sus propios propósitos partidistas, como las diferentes derechas, pensando en las elecciones», ha explicado.
«MÁXIMA ACEPTACIÓN EN EL GOBIERNO»
En otro asunto, preguntado por las reacciones de sus compañeros de Gobierno que indicaron que hablaba a «título personal» y no como ministro y que «lamentaban» sus «desafortunadas» declaraciones, Garzón ha asegurado que lo que dijo «tiene máxima aceptación en el Gobierno» porque donde gobierna el PSOE «está contra las macrogranjas».
Además, en referencia a las palabras del ministro de Alimentación, Luis Planas, que indicó que «si alguien habla de alimentación, lo normal es que me llamen», ha indicado que mantiene «buena relación» y que comparten «algunos espacio de Gobierno». «Él sabe cuál es nuestra línea de trabajo. El contenido de esas declaraciones lo había manifestado yo previamente y posteriormente. Él lo conocía», ha zanjado, al tiempo que ha asegurado que lo que indica está en los documentos del Gobierno.
En este sentido, el titular de Consumo ha negado que la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ni el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hayan pedido su renuncia, tal y como piden los partidos de la oposición.