El Ministerio de Trabajo, liderado por Yolanda Díaz, ha reconocido los desafíos que enfrenta en el desarrollo de medidas para promover la igualdad LGTBI en las empresas, conforme lo establecido en la ley trans. Según ha adelantado Invertia, el reglamento destinado a garantizar la igualdad y prevenir la discriminación de las personas LGTBI en el ámbito laboral se retrasará respecto a los plazos previstos inicialmente.
La denominada ley trans, que entró en vigor el 2 de marzo de 2023, estableció un periodo de un año para la elaboración de un conjunto de medidas y recursos dirigidos a la inclusión laboral de este colectivo. Sin embargo, parece que este objetivo no se cumplirá en el plazo establecido, según señalan el citado medio.
El retraso en la implementación del reglamento para la igualdad LGTBI en las empresas supone un obstáculo en el avance hacia la plena inclusión y el respeto a los derechos de este colectivo en el ámbito laboral. Si bien la ley trans representa un paso significativo en la protección de los derechos de las personas LGTBI, su efectividad depende en gran medida de la adecuada implementación de las medidas contempladas en la normativa.
TRABAJO Y AGENTES SOCIALES SE CITARON POR PRIMERA VEZ HACE DOS DÍAS
El Ministerio de Trabajo y los agentes sociales se vieron las caras por primera vez en la mañana del martes 13 de febrero para inaugurar la tan esperada mesa de Diálogo Social. Este encuentro llega con cierto retraso, considerando los plazos establecidos por la ley, que otorgan apenas 15 días para llegar a un consenso, cerrar el reglamento y promulgar el texto correspondiente.
CC. OO. y UGT fueron los primeros en aportar sus puntos de vista durante la reunión inicial, según señala el medio citado. Sin embargo, la mesa queda ahora a la espera de otra convocatoria y de conocer las propuestas de la patronal. El secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, admitió tras la reunión que el Gobierno «no ha podido cumplir con esa fecha del desarrollo reglamentario debido al proceso electoral». No obstante, Pérez Rey se comprometió a avanzar «cuanto antes» y con «premura», ya que considera «inaplazable» alargar más el trámite.
La urgencia se hace eco también entre los sindicatos. Mari Cruz Vicente, secretaria confederal de Acción Sindical de CC. OO., reconoció la necesidad de «agilizar el proceso de negociación», por el hecho de que van «un poquito justos» para cumplir con los plazos del desarrollo reglamentario. Por su parte, Toño Abad, responsable del área LGTBI de UGT, insistió en que no se puede esperar más, puesto que «finaliza el plazo de aplicación de estas medidas».
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El encuentro entre el Ministerio de Trabajo y los agentes sociales representa un primer paso en la dirección correcta para abordar la regulación de la igualdad LGTBI en el ámbito laboral. Aunque el tiempo es escaso, la voluntad de todas las partes involucradas es clara: tomar medidas con prontitud para garantizar la protección y el respeto de los derechos de las personas LGTBI en el mundo laboral.
LAS PROPUESTAS DE UGT Y CC. OO.
En el contexto del diálogo social sobre la regulación de la igualdad LGTBI en el ámbito laboral, los sindicatos UGT y CC. OO. han presentado una serie propuestas para el reglamento que buscan garantizar la efectiva aplicación del artículo 15 de la ley trans. Este artículo obliga a las empresas con más de 50 empleados a implementar medidas y recursos para asegurar la igualdad real de las personas LGTBI, así como a establecer protocolos para la atención del acoso o violencia contra ellas.
El documento presentado por UGT enfatiza la utilización de un lenguaje inclusivo y la implementación de herramientas de protocolo para proteger a las víctimas de acoso. Además, propone sanciones para las conductas acosadoras y medidas para generalizar los permisos y licencias relacionados con los cuidados familiares. Toño Abad, responsable del área LGTBI de UGT, subrayó que estas medidas son especialmente importantes para las personas LGTBI, ya que muchas sienten miedo de mostrar su orientación sexual al solicitar permisos relacionados con el cuidado familiar.
El texto de UGT también aborda la situación laboral de las personas trans, destacando que el 40% de ellas son rechazadas de forma indirecta y el 15% de manera directa. Frente a esto, el sindicato propone la eliminación de sesgos discriminatorios y un protocolo de acompañamiento laboral durante las transiciones de género, ya que muchas empresas optan por el despido en estos casos.
Por su parte, CC. OO., aunque ofreció menos detalles sobre su propuesta, sigue las mismas directrices similares a las de UGT. Destacando la inclusión de lenguaje inclusivo y políticas activas de empleo y promoción para garantizar trabajos inclusivos sin discriminación por orientación sexual.
Asimismo, ambos sindicatos expresaron su confianza en alcanzar un acuerdo pronto con el Ministerio de Trabajo. Y coincidieron en que existen «muchos puntos de encuentro» y un «consenso generalizado» sobre la necesidad de aprobar el reglamento lo antes posible. Según las declaraciones de Marí Cruz Vicente, secretaria confederal de Acción Sindical de CC. OO., apuestan por un «desarrollo reglamentario, claro, concreto y eficaz, capaz de llevarse a la práctica con éxito».
