A pesar de todas las idas y venidas, y de los cambios de nombre, ‘Viva la Vida’, el programa al que se ha amarrado Emma García, ha conseguido su hueco en la programación fija de Telecinco. Otros programas de aquellos años no pueden decir lo mismo. Lo que nació como un espacio llamado “Que tiempo tan feliz”, dirigido y orquestado por María Teresa Campos donde se recordaba cada semana la vida y milagros de algún famoso, ha derivado en el programa del corazón más sutil de la principal cadena de Mediaset España.
Y eso a pesar de que su presentadora, Emma García, no es precisamente la más querida del público. La periodista acumula más de veinte años de forma continuada y exclusiva en Mediaset. Ella afirma que su relación con Paolo Vasile, responsable del grupo mediático, es muy buena. Quizás por ello se le perdone sus malos gestos. Como el último que ha protagonizado y que no ha gustado a muchos de sus compañeros.
4LAS TENSIONES QUE HAN DILAPIDADO SU IMAGEN
A pesar de que el estilo de Emma García es más el sosegado, el calmado y el dejar fuera toda polémica, su carácter ácido y directo ha generado varios momentos de tensión con sus colaboradores. Especialmente con aquellos con los que no encaja especialmente pero que vienen recomendados por arriba o por el juego de las audiencias.
El más llamativo fue el caso de Jorge Brazález, que tuvo su propia sección de cocina en ‘Viva la vida’. Un espacio informativo, y formativo, hasta que en un momento dado Emma García quiso que el joven hablara de su vida privada. Curiosamente, a la semana siguiente se dejó de emitir. Aunque ambas partes explicaron que era porque el chef iba a embarcarse en una nueva aventura y no podía compaginar ambos proyectos. La audiencia nunca lo ha creído por completo, viendo la tensión del momento.
Con Avilés, que finalmente ha salido de ‘Viva la vida’ y con las Campos, también se nota la tensión y el poco aguante que puede tener Emma García para mostrarse más profesional.
