Una de las cosas más efímeras que existe es la fama. Y especialmente la que tiene que ver con el mundo de la televisión. Por nuestra pantalla han pasado numerosos presentadores y profesionales del medio que después de alcanzar cierto éxito, de repente, de la noche a la mañana, desaparecen. No siempre trascienden las razones, pero sea por el motivo que sea su desaparición resulta bastante desconcertante. A continuación, algunos de los casos más llamativos.
Óscar Martínez
Como muchos otros compañeros de profesión, Óscar Martínez empezó en una radio local. Desde allí daría el salto a diversos programas de Telemadrid hasta terminar en Antena 3 presentando un programa llamado De buena mañana. Pero sería tras dar el salto a Telecinco, cuando se convirtió en uno de los presentadores más reconocidos por la audiencia. Acompañó a Ana Rosa Quintana en su programa Día a Día, donde también coincidió con el fugaz Ministro de Cultura Maxim Huerta. En el año 2009, volvió a Antena 3 para probar nuevos proyectos, pero ninguno salió bien. Desde entonces, ha presentado varios programas radiofónicos con distinto éxito hasta hace un par de años que dejó la comunicación para dedicarse a la docencia en la universidad Francisco de Vitoria en Madrid.
