Es fundamental que cuides de tu perro adiestrándole y no malcriándole. Dicen que este animal es el mejor amigo del hombre por lo que puedes caer en acciones que consideres buenas pero realmente sean nocivas. La educación canina además de establecer un comportamiento adecuado incorpora enseñanzas imprescindibles para su salud.
Los premios y caprichos puedes pensar que son maravillosos pero sin embargo pueden ocasionarle problemas. Tu mascota es tu responsabilidad por lo que deberás protegerla del peligro. Descubre las cosas con las que no debe jugar y las que no le debes dar evitando que se desencadenen efectos adversos.
No le des huesos
Al igual que pasa con los palos, es realmente peligroso darle los huesos que sobran de la comida al perro. Popularmente se cree que es prácticamente un premio, pero aunque le encantaran corre un grave peligro. Podrían astillarse y clavarse tanto en la garganta como en el estómago los huesos. Si esto sucede podría ser letal. Además podrían acarrear otros problemas como la mala digestión y la posterior evacuación.
