Collboni da entrada a Ada Colau en Barcelona por la puerta de atrĂ¡s

El PPC de Barcelona exigiĂ³ a Jaume Collboni no dar cabida a Ada Colau en su equipo de gobierno para dirigir el Ayuntamiento de Barcelona. No obstante, el alcalde socialista ha abierto la puerta de atrĂ¡s para colar a la formaciĂ³n ‘morada’ en el Consistorio, un pago como favor al apoyo de los ‘comunes’ a su investidura.

A la vista de todos, ningĂºn concejal de Colau se sentarĂ¡ en ninguna de las concejalĂ­as del Consistorio, pero el acuerdo con el PPC se obvian los altos cargos estructurales. De esta forma, Collboni mantendrĂ¡ los asientos directivos y de gerencia en el Ayuntamiento de Barcelona, es decir, el llamado ‘sotoogoverno’.

Jordi MartĂ­, nĂºmero dos de Colau en el Ayuntamiento, negĂ³ por activa y por pasiva esta posibilidad tras conocerse el resultado electoral. A su juicio, este intercambio de sillas no era eficaz ni activo cuando se podĂ­a vislumbrar un gran gobierno municipal de izquierdas, con ERC como apoyo bĂ¡sico para sacar adelante las cuentas.

De hecho, el propio MartĂ­ instĂ³ a Collboni a esta alianza «natural» para continuar con la gestiĂ³n de la Ciudad Condal, convertida en un nido de ocupaciĂ³n ilegal, inseguridad y un caos en la movilidad.

COLLBONI BUSCA LA FĂ“RMULA PARA GOBERNAR CON COLAU

Collboni mantendrĂ¡ toda la estructura diseñada por Colau para garantizar su continuidad en el gobierno municipal. Es decir, el cumplimiento de un pacto oculto entre PSC y los ‘comuns’, del que el PPC ha sido colaborador necesario para hacerlo posible con sus cuatro votos. Los ‘populares’ justifican el sĂ­ a la investidura de Collboni por sentido de Estado, pese a que los tentĂ¡culos de Colau se mueven en las dependencias de mayor rango y menos visibles del Consistorio.

Collboni ha dejado la puerta abierta en el caso de que ERC apoye un Gobierno con Ada Colau

Collboni, ademĂ¡s, ha dejado la puerta abierta en el caso de que ERC apoye un Gobierno con Ada Colau. De hecho, hasta ofreciĂ³ el gobierno de coaliciĂ³n a Colau, pero los ‘morados’ se negaron por completo a formar parte de la coaliciĂ³n a estar a expensas de los ‘populares’ y de ERC. En este sentido, ha asegurado que buscarĂ¡ fĂ³rmulas para hacer gobernable el Consistorio y un primer paso es mantener la paz con la formaciĂ³n de la ex alcaldesa de Barcelona.

COLLBONI GANA TIEMPO GRACIAS A LOS ‘POPULARES’

De esta forma y con el inestimable apoyo del Partido Popular de Barcelona, Collboni sĂ³lo ha ganado tiempo para desprenderse lo antes posible de esta atadura. Como suelen hacer los socialistas, la intenciĂ³n es ganar poder a costa de hundir al contrario y si no es posible, ayudarse en forma de muleta del llamado constitucionalismo para sacar adelante sus objetivos. Todo ello aderezado con falsas promesas bajo el disfraz de ganar terreno al independentismo.

Pere Aragonès y Jaume Collboni (dcha) se saludan y no se descarta el pacto para gobernar Barcelona
Jaume Collboni (dcha) se saludan y no se descarta el pacto para gobernar Barcelona

No obstante, al PSC le gusta el pacto y lo hace indistintamente con cualquier formaciĂ³n polĂ­tica, independientemente de su ideologĂ­a. Si hay que pactar la DiputaciĂ³n de Barcelona con la marca de Carles Puigdemont, se pacta; si hay que hacerlo con los de Oriol Junqueras en las Diputaciones de Lleida y Tarragona, se hace; y si hay que usar al PPC como moneda de cambio para alzarse con la AlcaldĂ­a de Barcelona, se usa. Todo ello en menos de dos semanas. Pero el fin es «parar al independentismo».

Las Diputaciones en Cataluña tienen un presupuesto enorme. SĂ³lo la de Barcelona maneja este año 1.242 millones de euros, prĂ¡cticamente un tercio del gasto del Ayuntamiento de Barcelona, cuyo importe ronda los 3.600 millones de euros; mientras que en Lleida y Tarragona el importe alcanza los 149,6 y los 189 millones de euros, respectivamente.

EL PSC DE COLLBONI PREPARA LA PINZA AL PPC

Con este escenario, el PSC prepara la pinza al PPC, un quiebro con el que los ‘populares’ tendrĂ¡n que lidiar con Vox a la hora de poner los puntos sobre las Ă­es. Y es que, MartĂ­ lo tiene ahora mĂ¡s claro que nunca al asegurar que entrarĂ¡n en el Gobierno municipal, un movimiento que se espera tras la convocatoria electoral del 23 de julio. Los ‘comunes’ se niegan a liderar un ejecutivo con el apoyo del PP, pero poco les importĂ³ que lo obtuvieran con Manuel Valls hace cuatro años.

Por el mismo fin y por distintas razones que el PPC, Colau apoyĂ³ a Collboni para gobernar en Barcelona. Los ‘populares’ no querĂ­an ver a un independentista sostener el bastĂ³n de mando, mientras los ‘comuns’ buscaban eliminar de la ecuaciĂ³n a la derecha catalanista en Barcelona. Xavier Trias tenĂ­a asĂ­ las horas contadas como alcaldable.

Sin embargo, el voto de Colau es un «regalo envenenado» para Collboni, que tendrĂ¡ que pactar las nuevas ordenanzas y cambios en los barrios con los ‘comuns’, es decir, dar marcha atrĂ¡s a las propias medidas que los socialistas han apoyado durante los Ăºltimos cuatro años. Para la formaciĂ³n mĂ¡s afĂ­n a Yolanda DĂ­az, la posibilidad de un Gobierno de izquierdas sigue viva. Ahora, la labor serĂ¡ explicarle a su electorado este pacto oculto.