Quizá muchos tenéis una imagen diferente de Julio José Iglesias por su desparpajo y su actitud de «juergas» y de ir por libre, pero la realidad es que el hijo de Julio Iglesias lleva, o mejor dicho, llevaba ocho años casado. Ahora es noticia por la reciente ruptura con su mujer, Charisse Verhaerts. En estos casos de parejas con un patrimonio importante, queda la lucha legal y la batalla por la fortuna.
La pareja llevaba mucho más de esos ocho años de matrimonio, ya que han sido más de 16 años juntos. La noticia ha sorprendido para lo que pensaban que era una pareja consolidada y eterna, pero al parecer la crisis venía de largo. De hecho, la demanda de divorcio ya fue presentada en la Corte de Miami el pasado verano. Veamos todo sobre esta historia y sepamos más de esta ya ex pareja.
Un divorcio que traerá cola
Como todos los matrimonios con mucho dinero y patrimonio en juego, la solución legal del divorcio va para largo y tiene muchos flecos legales y económicos. Para empezar, si el proceso se está alargando es porque Julio José necesitaba tiempo para aportar toda la documentación económica que le ha pedido Charisse Verhaerts.
Esto ha sido seis meses después del primer requerimiento, según el diario ABC, cuando la modelo ha presentado un segundo para que el proceso se agilice. Lo que ella pretende es disponer del patrimonio que han fraguado mientras han estado casados. Todo parece que va a ir en plan amistoso, al menos de cara a la galería porque aún se siguen en redes y hasta se dan likes, pero todo apunta a que los respectivos abogados tendrán trabajo y ambas partes defenderán sus intereses.
