El fallo más habitual de la ITV que te puede costar 1.000 euros

La Inspección Técnica de Vehículos (ITV) es una revisión a la que debe someterse todo vehículo para poder circular de forma legal por las carreteras españolas, tal y como exige la Dirección General de Tráfico (DGT). De ahí que sea tan importante que nuestros coches cuenten con un buen mantenimiento.

Además, a la hora de acudir a la revisión del vehículo, es necesario conocer el fallo más habitual de la ITV y que te puede costar hasta 1.000 euros. Te contamos todo lo que debes saber para evitarlo.

EL ESTADO EXTERIOR DEL VEHÍCULO TAMBIÉN ES UN FALLO HABITUAL EN LAS ITV

EL ESTADO EXTERIOR DEL VEHÍCULO TAMBIÉN ES UN FALLO HABITUAL EN LAS ITV

Entre los fallos comunes que los técnicos de la ITV se encuentran en las inspecciones es el mal estado de algunas de las partes del exterior del vehículo, es decir, daños que afectan a la careocería.

El problema en este sentido llega cuando elementos de la carrocería como paragolpes, faros o retrovisores, entre otros, no están bien sujetos o tienen signos claros de que se pueden llegar a desprender por estar en muy mal estado.