La Junta de Andalucía ha pedido al Gobierno central que, al igual que ha solicitado para las playas, también las piscinas públicas puedan abrirse en la fase 2 del plan de desescalada de la crisis del coronavirus –cuyo inicio está previsto para el próximo lunes 25 de mayo en aquellos territorios que cumplan los requisitos–, en vez de en la fase tres, que arrancaría al menos dos semanas después de esa fecha, ya en el mes de junio por tanto.
Así lo ha anunciado el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, en la rueda de prensa posterior a la reunión que este miércoles ha mantenido el Gabinete de Crisis de la Junta que aborda la evolución de la pandemia del coronavirus.
El consejero ha defendido esta petición relativa a las playas aludiendo a un informe del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) que «dice medianamente claro que las piscinas no son de foco de contagio a nivel de coronavirus, máxime cuando el agua está clorada» en ellas.
MEDIDAS PARA LAS PLAYAS
En relación a las playas, el titular andaluz de Salud ha detallado algunos de los planteamientos que realiza la Junta para su reapertura al baño en condiciones de seguridad sanitaria.
Así, ha expuesto que «la autoridad local» será la que «establecerá aforo y horario de apertura y cierre», mientras que habrá que llevar a cabo medidas de «limpieza, desinfección y cartelería informativa de las medidas a tomar higiénico-sanitarias» en los accesos a las mismas.
De igual modo, la Junta llama a «mantener la distancia de seguridad» en las playas, así como a que los menores vayan «acompañados», y que se implementen acciones de «limpieza y desinfección» en espacios de uso común como duchas, sombrillas o hamacas, según ha continuado el consejero, quien también ha explicado que habrá igualmente que delimitar cuestiones como las relativas a primeros auxilios y socorrismo.
