Castilla y León es la comunidad autónoma más extensa de España y también una de las más bonitas. A lo largo y ancho de sus casi 95 mil km² de superficie se pueden hallar preciosos paisajes que no dejan a nadie indiferente. Epicentro del Camino de Santiago, cuenta con 9 provincias que albergan en sus municipios una inconmensurable belleza tanto natural como arquitectónica: Ávila, Burgos, León, Palencia, Salamanca, Segovia, Soria, Valladolid y Zamora.
Pero su encanto va más allá de sus capitales y grandes ciudades. Castilla y León tiene en su territorio una enorme cantidad de pueblos hermosos que si o si deberías visitar al menos una vez en la vida. Monumentos históricos, espacios naturales, buena comida (imperdible la cecina) y por supuesto, maravillosas personas que estarán encantadas de recibirte. Presta atención a los sitios que nombraremos a continuación porque estamos seguros de que querrás conocerlos ni bien levanten el cierre perimetral.
Mogarraz: un pueblo diferente enclavado en la Sierra de Francia
Nos adentramos en la provincia de Salamanca, a unos 80 kilómetros de la capital. En la Sierra de Francia está Mogarraz, que no llega a los 300 habitantes pero, conforme pasan los años, cada vez son más los turistas que se acercan a conocer este bello pueblo castellano. Su principal atractivo son los retratos que adornan las fachadas de sus casas de piedra impecablemente conservadas. La Torre del Campanil es otro de los puntos de interés más destacados. Pero eso no es todo. Su fabulosa comida también merece una mención. Nadie puede dejar este extraordinario rincón de Castilla y León sin antes probar sus ibéricos. Otra particularidad de Mogarraz son sus trajes de vistas, bordados a mano y muy famosos en toda España.
